For Emma, forever ago (2008).
El otro día comentando el disco de The Duke and the King me vino a la cabeza este de Bon Iver, y aunque no son similares, sí comparten raíces y una extrema sensibilidad como señas de identidad. Hay puntos de inflexión en la vida que te sirven para dar un giro radical a la misma y lo que puede ser malo en un primer momento se convierte en una experiencia enriquecedora, eso le pasó a Justin Vernon (Bon Iver) cuando su vida personal sufrió un revés inesperado, su grupo se separó y decidió recluirse tres meses en una cabaña en el noroeste de Wisconsin y crear este For Emma, forever ago. El disco es una maravilla de Folk minimalista, que se construye a base de "lamentos", tímidas guitarras y la naturaleza como coro, todo ello consigue crear una atmósfera mágica que actúa como perfecto hilo conductor para expresar toda la paleta de sensaciones, canciones como Flume, Lump sun o For Emma son hilos conductores de las frustraciones y sentimientos que invadieron a Vernon en ese período de su vida, un álbum intimista y de una extraordinaria sensibilidad que supuso un paso de gigante en la carrera de este artista. Muchas veces de la adversidad salen cosas extraordinariamente bellas y este disco lo atestigua.
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