Submarine

Alex Turner.
Submarine (2011).

Que soy un fan incondicional de Alex Turner, eso es un secreto a voces, sus 3 discos con Arctic Monkeys me parecen sublimes y un referente dentro del Power-Rock actual, además en cada disco Alex Turner ha ido introduciendo grandes medios tiempos, en los que nos deja hace partícipes de su devoción por la melodía, el Western de Leone y la música de los 70, si a todo esto sumamos el grandísimo The age of the understatement, publicado con su otra formación The last shadow puppets, tenemos ante nosotros a uno de los compositores más interesantes y prolíficos del momento. Ahora que está grabando el cuarto disco de Arctic Monkeys, nos llega la banda sonora que compuso para la película Submarine, 6 cortes que se escuchan en un suspiro y que son una delicia melódico-intimista, en especial los dos últimos Stuck On The Puzzle y Piledriver Waltz, cada tema es un derroche de sensibilidad, sensualidad, dotes compositivas e interpretativas, un álbum que te deja con la miel en los labios y contando las horas que quedan para la publicación de ese ansiado cuarto disco. Una gozada de álbum tan breve, como letal para el alma.

El pequeño Christian

Blutch.
El pequeño Christian.

Hubo una etapa en la que todos los niños gozábamos de una deliciosa ingenuidad, en la que jugábamos a indios y vaqueros, policías y ladrones... años en los que actores como John Wayne, Steve MacQueen, Gary Cooper o Marlon Brando nos hipnotizaban con su carisma y las sagas de La Guerra de las Galaxias e Indiana Jones se ganaban un hueco en nuestros corazones, donde la imaginación era nuestro mejor juguete y daba forma a cualquier objeto que cayese en nuestras manos... Blutch, el autor del genial Blotch, en el que se me antoja como su mejor trabajo hasta la fecha, plasma con gran ternura y humor esa maravillosa etapa y el gradual despertar de la misma, es un relato lleno de nostalgia y cariño, que describe la infancia de una generación que no tiene cabida en el mundo actual, en el que los niños se crían rodeados de consolas, ordenadores y todo tipo de juguetes... no es que esté en contra de la tecnología, pero pienso que hay un tiempo para cada cosa y no es más feliz quien más tiene... Una lectura ágil y entrañable que emociona y divierte por igual. Tan joven y tan viejo, like a Rolling Stone.